Justin Bieber no tiene la culpa de causar histeria entre millones de jóvenes que lo adoran.
Las fans lloran, gritan y se desmayan a donde quiera que va. Ya sea a un concierto o caminado o simplemente en un restaurante.
Esto es lo que le pasó a Justin que quería pasar lo más desapercibido que se pudiera, pero es obvio que si hay en el lugar una niña o adolescente no se va a poder.
Justin solo quería cenar tranquilamente en Serendipiti 3 en Nueva York después de su actuación en el programa de "Today Show".
Enfundado en una chamarra con gorra, tratando de que nadie lo reconociera y buscando sentarse en un rincón del famoso restaurante, un grupo de niñas que estaban cenando en el mismo lugar lo descubrieron y empezaron los gritos.
Un espía comentó que una de las niñas se puso tan histérica que todas las otras personas que estaba en el lugar la voltearon a ver fue tal su impresión de ver a Justin Bieber que empezó a temblar y calló en su silla.
Justin Bieber no puede ir a ningún lugar en el que nadie que sea joven no lo reconozca y se ponga histérico. ¡Es el precio de ser quien es!
Foto: wikimedia commons.
Justin Bieber Indonésia